NOTIVIDA, Año IV, nº 267,
15 de diciembre de 2004 Ciudad de Buenos Aires,
Argentina EDUCACIÓN SEXUAL:
TRIUNFARON LOS PADRES DE FAMILIA La Ciudad de Buenos Aires no tendrá por
ahora ley de educación sexual. Ni el proyecto de Suppa ni el De Estrada
consiguieron anoche los votos necesarios. Largas horas de espera e inexplicables dificultades
para ingresar precedieron a la sesión. Un férreo operativo policial custodiaba
el frente de la Legislatura que estaba vallado para “dejar afuera a los grupos más radicalizados
contrarios a la incorporación de la educación sexual en las escuelas porteñas”
(Página 12,
14/12/04). Durante el debate hubo muchos discursos. Los
partidarios del proyecto de Suppa esgrimieron supuestas estadísticas sobre
embarazo adolescente, SIDA, aborto, etc. y acusaron de oscurantistas y
fundamentalistas a quienes se oponían al proyecto. Los que defendieron el
proyecto de De Estrada hablaron de familia y de derechos de los padres, pero
sólo el diputado Ricardo Busacca concretó, en las observaciones que formuló, el
reclamo de los padres de familia: de sancionarse educación sexual que sea
optativa y extracurricular. Los discursos Marcelo Godoy: el presidente de la Comisión de
educación aseguró que la mayoría de los ciudadanos quiere educación sexual en
las escuelas y que la cantidad de adolescentes embarazadas, el SIDA, etc. exige
la ley; pero destacó al mismo tiempo que “ésta no debe excluir a los padres”.
“Hay que educar en el amor”. “Los programas de educación sexual eficaces son los
que refuerzan valores”. Ana Suppa: le reclamó al dip. De Estrada haber
presentado un proyecto de educación sexual con el único fin de obstaculizar la
sanción del promovido por SIGLA y presentado por ella. Dijo que las opiniones
estaban polarizadas: de un lado los que defienden la escuela pública y la
educación igualitaria y del otro los que defienden los derechos de los padres y
el rol subsidiario del Estado. Santiago De Estrada: aseguró que nadie duda de la
necesidad de la educación sexual. “La discusión gira en torno a los contendidos
y a quien la orienta y lleva a la práctica”. Destacó que mientras la oposición
al proyecto de Suppa provino de padres, educadores y credos, el apoyo se lo
dieron las ONG's feministas. Juan Carlos Lynch: “el trato diario, personal y
afectivo de padres e hijos, les da a los padres la posibilidad insustituible de
educarlos”. Daniel Betty: destacó la intolerancia de los
“fundamentalistas católicos” puesta de manifiesto recientemente a raíz de la
exposición de Ferrari y la conferencia de Rebecca Goomperts (la capitana del
barco de la muerte). Beatriz Baltroc: remarcó la necesidad de una ley de
educación sexual. Habló de los abusos sexuales y asimiló una vida digna a la
posibilidad de elegir el número de hijos. Alicia Carusso: anticipó que el bloque de Ibarra no iba a apoyar ningún proyecto, lo que provocó el encono del resto de los “progresistas”. Moresi, su compañera de bloque, dijo a posteriori que el proyecto de Suppa era inconstitucional porque desde la Legislatura no se pueden fijar los contenidos. Fernanda Ferrero: dijo que los legisladores no tienen autoridad para fijar los contenidos de la educación sexual y rechazó que se imponga desde el Estado, sin intervención de la familia. Jorge Enríquez: resaltó que la educación sexual no
fue tema de campaña, hizo foco en
los derechos de los padres y fustigó la ideología de género. María Soledad Acuña: defendió enfáticamente la
perspectiva de género. Héctor Bidonde: resaltó el actual estado de la
juventud –drogas, violencia y alcohol- y dijo que padres que no pudieron
contenerlos no podrán educarlos en la sexualidad. Norberto La Porta: se autodefinió como agnóstico y
defendió la libertad de pensamiento y la educación gratuita, laica y
obligatoria. Paula Bertol: manifestó “no soy feminista soy
femenina”. “Cuando escucho estadísticas sobre aborto pienso en los niños por
nacer”. Ricardo Busacca: le señaló a los que
impulsan una educación sexual con contenidos oficiales porque el “Estado no
puede estar ausente”, que una cosa es un Estado ausente y otra el que se mete en
las casas. Destacó que los padres tienen obligaciones para con sus hijos y que
de ellas manan derechos. Manifestó las dudas que la reglamentación e
implementación de cualquier proyecto de educación sexual por parte del Gobierno
de la Ciudad le genera, por lo que pidió que la materia adopte el modo
optativo y extracurricular. Le recordó a quienes impulsan los
proyectos de educación sexual que ellos mismos, cuando defienden leyes como las
del divorcio o aborto, usan como caballito de batalla que esas leyes no generan
prácticas obligatorias y pidió que de implementarse un proyecto de educación
sexual, tampoco sea obligatorio. La votación El proyecto de Suppa obtuvo menos votos
a favor que el de De Estrada, pero éste último no totalizó -entre los votos a
favor y en contra- el mínimo de 31 requerido para sancionar. Luego ninguno
de los dos fue aprobado. El resultado Suppa: 24 votos a favor, 28 en
contra. De Estrada: 26 votos a favor, 3 en
contra y 23 abstenciones. Entre los que fueron a la sesión a
apoyar el proyecto de Suppa estaban: el
presidente de SIGLA, Rafael Freda; las abortistas María José Lubertino y Cecilia
Lipszyc;
las diputadas nacionales María Elena
Barbagelata y Juliana Marino y los exdiputados de la Ciudad Clori Yelici y
Eduardo Jozami; que esta vez se retiraron cabizbajos, mientras los padres de
familia celebraban alborozados poder seguir educando ellos mismos a sus hijos.
FIN _____________________________________ NOTIVIDA, Año IV, nº 267, 15 de
diciembre de 2004 Editores: P.Juan
C. Sanahuja y Mónica del Río Página
web http://www.notivida.org Email
notivida@notivida.com.ar Para suscribirse
al boletín ingrese
aquí ______________________________________ Citando la
fuente y el autor, se autoriza la reproducción total o parcial de los artículos
contenidos en cada número del boletín. |